El informe de la forense confirma que las sustancias tomadas por el fallecido se configuran como "alcaloides", que aumentan los efectos cardiovasculares como la tensión arterial, la frecuencia cardíaca y las arritmias, además de provocar una vasoconstricción coronaria.

Matiza que la DMT fumada y la cocaína esnifada producen efectos muy rápidos, en este caso letales, pues la causa de la muerte, añade, fue el consumo conjunto de ambas sustancias (cocaína y DMT), no pudiéndose desvincularse una de la otra.

Con tales argumentos, añade el juzgado, debe concluirse que no concurren indicios suficientes de la participación de Nacho Vidal en el fallecimiento del fotógrafo, por lo que decreta el sobreseimiento provisional de la causa y su archivo.

Nacho Vidal se encontraba investigado por el Juzgado de Primera Instancia número 2 de Xàtiva (Valencia) por la muerte de un fotógrafo durante la celebración de un rito conocido como del sapo bufo, en que el que se ingiere cierta droga o toxina producida por este animal.