La Policía Nacional había desplegado un dispositivo de vigilancia, a través del cual detectaron a ambos sujetos accediendo de forma ilícita a domicilios
Detenido tras dar un puñetazo a un varón para robar dos teléfonos móviles y 400 euros en una vivienda
Los agentes localizaron al responsable de los hechos en la Plaza del Ejército, donde se estaba pegando con otro individuo
La Policía Nacional y la Policía Municipal han detenido, en una operación conjunta, a un varón, por los delitos de allanamiento de morada, lesiones y robo con violencia. El Servicio de Emergencias 112 de Castilla y León recibió un aviso de una agresión. En ese preciso instante, los testigos confirmaron que un individuo había accedido al interior de una vivienda tras dar una patada a la puerta, romper la cerradura y robar los teléfonos móviles de los varones que allí se encontraban, así como 400 euros.
Las víctimas, entre ellas el dueño de la casa, explicaron que el arrestado les había amenazado el día anterior con un cuchillo. Solo 24 horas después de lo sucedido, cumplió con lo prometido y accedió al interior del domicilio. Allí se encontró con una de las víctimas, a la que propinó varios puñetazos en la espalda. Este tuvo que ser atendido por los servicios médicos que le trasladaron al Hospital Río Hortega para su valoración.
Tras el robo, los agentes localizaron al responsable de los hechos en la Plaza del Ejército, donde se estaba pegando con otro individuo. Una vez realizado un cacheo superficial de seguridad se intervenía un teléfono móvil que el varón no sabía desbloquear, procediendo a su detención como presunto autor de los delitos de allanamiento de morada, lesiones y robo con violencia. Fue puesto en libertad con cargos después de pasar a disposición de la Autoridad Judicial.
El hombre maniobró de forma irregular al ver el control en la carretera lo que alertó a los agentes
El individuo, que llevaba el rostro y cabeza cubiertos con una braga, portaba una pistola, aparentemente, de aire comprimido
Los arrestos se produjeron el pasado lunes tras una reyerta en el barrio de Belén