En 2005 Fernando Martín abrió las puertas en la Santa Espina del restaurante 'El Rincón del Labrador'. Con el paso del tiempo se erigió como un referente de la restauración en la provincia de Valladolid gracias a su promoción de la gastronomía en el medio rural. Ahora, dieciocho años después ha llegado el momento de decir adiós y echar abajo la persiana de este mítico negocio famoso por sus jornadas micológicas y sus caracoles. También es conocido por haber acogido en múltiples ocasiones comidas del Real Valladolid, pero siempre se recordará por una foto de Ronaldo comiendo los famosos caracoles del restaurante.

"Ha llegado el momento de decir adiós. Así directos y al grano, pues es muy difícil para nosotros tener que anunciar que después de casi 18 años, cerramos las puertas del Restaurante El Rincón del Labrador el día 1 de Febrero. Un negocio familiar, en el que hemos pretendido ofrecer un ambiente acogedor, un servicio de calidad y una cercanía con la que hemos tratado de haceros sentir lo más cómodos posible", comentaba su dueño en redes sociales este martes.

Tras tanto tiempo aseguran que "no ha sido una decisión sencilla", pero hasta el último servicio seguirán disfrutando de su trabajo con la misma intención del primer día "que estuvierais como en casa".  

Aunque cierran las puertas del restaurante, seguian trabajando en sus casas rurales 'Rincón del Labrador l' y 'Rincón del Labrador ll', así como las otras casas que tienen en la Ribeira Sacra.